
Qué significan los testigos del coche que se encienden en el cuadro de instrumentos del coche. Es una de las preguntas más frecuentes entre los usuarios de vehículos en España. Existen cientos de testigos del coche diferentes y es importante saber qué significan cuando alguno se enciende. No es necesariamente negativo, pero muchas veces sí nos avisan de una avería o inminente problema. Desde Surmoción te contamos todo acerca de las luces del cuadro de instrumentos y cómo debes actuar si alguna se enciende.
Qué son los testigos del coche
Son las luces del cuadro de instrumentos que informan o advierten al conductor de algo. Esta información o advertencia puede ser sobre algo relacionado con el vehículo y su tecnología o algo relacionado con un problema o inminente avería. Hay muchos tipos (se estima que más de 100) y son de diferentes colores según la gravedad. Se encienden y se apagan, parpadean o se quedan encendidos. Cada situación es una cosa diferente y es importante que sepas qué hacer en caso de que te suceda.
Testigo del coche encendido o parpadea
Si un testigo se enciende estará indicando, según el color, que un asistente de seguridad activa está actuando (si es verde o azul) o que hay una posible avería (si es rojo). Si se mantiene encendido, y por ejemplo es verde, puede ser que tengamos activado el control de crucero y esta tecnología está en uso.
En cambio, si se mantiene encendida la luz y es roja, puede estar indicando algún fallo en dicho componente. Debes acudir al taller a que comprueben lo que sucede. En cambio, que parpadeen no es una mala señal ya que cuando arrancamos el coche, todas las luces se encienden y parpadean para posteriormente apagarse. Esto se debe a que el coche hace una rutina de comprobación, donde se envía un mensaje a la red interna que devuelve el mensaje apagando los testigos. Si alguno se queda encendido entonces acude al taller.
De qué color son los testigos
Existen tres grupos diferentes a la hora de hablar de los testigos del coche. Los de aviso, generalmente de color amarillo. Los de atención inmediata, generalmente de color rojo. Y por último los informativos, generalmente de color verde o azul. Ahora te contamos detalladamente qué indica cada uno y te ponemos algún ejemplo.

Testigos de atención inmediata
Estos son los de color rojo. Aquellos que indican una avería y tenemos que acudir al taller o solicitar asistencia en carretera en muchas ocasiones. Algunos de los más comunes y que debes cuidar son los testigos de la batería o alternador. Estos indicarán algún fallo en esos elementos que pueden impedir el correcto funcionamiento del coche. El del airbag, que sin él no se puede circular. Fallo en el sistema de frenos o presión baja del aceite la cuál puede suponer una avería grave del motor.

Testigos de aviso
Estos son los de color amarillo. Indican una posible avería o un aviso de inminente avería. En muchos casos, o la mayoría, también debemos acudir al taller para evitar empeorar la situación. Conviene detener el vehículo si crees que pone en riesgo tu seguridad. En otros casos, si es por ejemplo el indicador de la reserva del combustible, valdrá con acudir a repostar. Otros ejemplos de testigos amarillos de aviso son: presión de neumáticos, mantenimiento próximo o nivel bajo de aceite.
Testigos informativos
Estos son de color verde. Son simplemente informativos y también pueden ser azules o blancos. Suelen estar relacionados con las luces de cruce o largas, sistemas de asistencia a la conducción y tecnologías de ayuda al conductor. En los coches actuales que están equipados con todo tipo de sistemas ADAS, es muy común ver estos testigos que indican: sistema de Start-Stop activado o desactivado, pedal de freno pisado o frenada regenerativa, luces largas activadas o sugerencia de cambio de marcha.